En el segundo mes del año se produjeron 10 mil 178 vehículos pesados en México, lo que representa una caída del 19% en comparación con el mismo mes del año pasado, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
De acuerdo con Miguel Elizalde, presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Productores de Autobuses, Camiones y Tractocamiones (ANPACT), esta disminución responde a una menor demanda de Estados Unidos, el principal destino de las exportaciones.
En este sentido, Elizalde señaló en conferencia conjunta con Guillermo Rosales, director general adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de automotores (AMDA), que las exportaciones también registraron un revés del 15.1%, con un total de 8 mil 907 envíos a otros países desde plantas mexicanas.
Nos obstante la caída, el directivo acotó que se espera que esto no sea una tendencia pues el número de pedidos que ya existen ahora indica que en marzo se tendrán mejores resultados en cuando a producción y exportación.
Las ventas al menudeo en México tuvieron una ligera variación positiva del 0.9%, mientras que al mayoreo se vio una caída del 8.2%.
No habrá recuperación sin certidumbre energética: ANPACT
Elizalde señaló que la esperada recuperación económica tras un año de pandemia, no será posible para el sector transportista sin que se tenga certidumbre energética sobre la distribución de diésel de ultra bajo azufre en México, necesario para la migración hacia nuevas tecnologías en motores.
Es por ello que insistió en que urge una reunión de trabajo con María Luisa Albores, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), a fin de exponer sus inquietudes con respecto a la NOM-044, la cual es imposible cumplir mientras no haya garantía de abastecimiento de diésel DUBA en todo el país.
Por ello, señaló, es imprescindible que esta norma se ajuste a la realidad energética local, por lo que deberían convivir las tecnologías Euro V-EPA 7 con la Euro VI-EPA 10.
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